La menor duración de horas de luz solar y el descenso de la temperatura son factores que en invierno aumentan el consumo de electricidad en los hogares.
En los meses del año más fríos también aumenta el consumo de electricidad, particularmente en aquellos hogares donde han reemplazado sus sistemas de climatización de gas a electricidad. Hoy, los hogares consumen aproximadamente más del 40% de la energía que se produce en el país, por ello es importante hacer un uso eficiente y responsable de la misma.
Desde el EPRE te brindamos algunas recomendaciones que te pueden ayudar a hacer un uso eficiente de la energía, para afrontar esta época del año. Son sencillas acciones que no implican resignar confort, que evitan consumos innecesarios y en consecuencia un ahorro en la factura del servicio eléctrico.
Climatización eficiente
- Mantener climatizado solo los ambiente que usas.
- Instalar burletes en puertas y ventanas para que no se filtre aire frío del exterior.
- Colocar cortinas, aleros o toldos en las ventanas para reducir el gasto de energía de los ambientes.
- Mantener y limpiar los sistemas de calefacción
- Aprovechar los rayos del sol para absorber el calor.
Aire acondicionado
- Fijar la temperatura del aire acondicionado en 22°C para un consumo equilibrado. En la noche apagarlo o, si no es posible, baja la temperatura algunos grados respecto al día.
Por cada grado más (calor) sube el consumo energético entre un 7% y 8%.
Caloventores
- Son los dispositivos menos eficientes, su uso debe ser moderado debido a su elevado consumo eléctrico para calefaccionar un ambiente, consumen el doble de un aire acondicionado.
Lavar y planchar
- Si vas a lavar y/o planchar hacerlo en lo posible en horas de baja demanda, de mañana y antes de las 11hs, y juntar la mayor cantidad de ropa.
- Evitar desperdicios de calor secando la ropa con la plancha, graduar el termostato de acuerdo al tipo de tejido y desconectarla antes de concluir la tarea para aprovechar el calor remanente.
- Si vas a lavar poca ropa, utilizar los programas económicos y, siempre que se pueda, lavar con programas de agua fría. Usar la cantidad correcta de jabón para no tener que realizar más de un enjuague.
Usar correctamente los electrodomésticos y/o artefactos eléctricos
- Desenchufar aquellos artefactos eléctricos que permanecen conectados a la red sin estar encendidos (equipos de música, televisores, hornos de microondas, decodificadores de televisión, consolas de video juegos, cargadores de celular etc.) ya que estarás consumiendo electricidad de todas formas. Ese consumo se denomina “energía en espera”. Procurar hacerlo, especialmente, antes de ir a dormir.
- Apagar la computadora cuando termines de usarla, una PC en modo de espera equivale hasta un 70% de su consumo en modo encendido.
Iluminación
- Evitar dejar las luces encendidas si no las utilizas y aprovechar la luz natural al máximo.
- Mantener limpios los focos. La tierra acumulada disminuye la intensidad lumínica en un 50%.
Heladera
- Asegurar que la puerta de la heladera y freezer cierre bien. Cambiar el burlete si está roto. Abrirla sólo cuando sea necesario y por el menor tiempo posible. Enfriar completamente las comidas antes de colocarlas en la heladera. Si se trata de una heladera con congelador, tener la precaución de descongelarla regularmente. El sobreconsumo comienza cuando la caja de hielo llega a un espesor de 5 mm.
Revisar las instalaciones
- Es recomendable hacerlo periódicamente para verificar el estado de conservación y funcionamiento de las instalaciones. De esta forma, evitarás fugas internas de electricidad y posibles accidentes.
Etiqueta de Eficiencia Energética
- Es una herramienta que nos permite conocer de manera rápida y fácil el consumo de energía de los artefactos eléctricos. Si va a reemplazar alguno de ellos, tenga en cuenta su etiquetado: clase A o superior permiten un mayor ahorro de energía